Pago Los Balancines presenta sus vinos más exclusivos en el restaurante Aderezo

La apuesta firme y decidida de Pedro Mercado por la creación de una bodega en Extremadura está más que consolidada, gozando en la actualidad los vinos de Pago Los Balancines de gran prestigio y numerosos reconocimientos, tanto a nivel nacional como internacional.

Después de casi una veintena de años de su aterrizaje en tierras extremeñas, y de una década de la construcción de la bodega, el empresario madrileño ha querido tener un gesto con La Zarza, su pueblo de acogida.

Con tal motivo, el pasado viernes por la noche tuvo lugar en el Restaurante Aderezo una cata especial y única donde el enólogo y propietario de la bodega se encargó de presentar a la treintena de asistentes (límite máximo establecido por los organizadores) una selección de vinos -cinco tintos y un blanco-, algunos de ellos exclusivos y agotados, maridados con unas exquisitas y atrevidas pizza -de atún rojo, carrilleras…- elaboradas por los dueños del restaurante, Patro y Alberto.

La producción de los vinos presentados es muy limitada -algunos de ellos en torno a las 300 botellas-, procedentes de viñas muy viejas y especiales.

Para Alberto Mateos, «ha sido un honor acoger en el restaurante Aderezo esta cata tan especial, ya que la misma se podía haber celebrado en cualquier otro restaurante de renombre de Extremadura o de Madrid».

En cuanto al motivo de elegir la localidad como lugar para la celebración de la cata, Pedro Mercado ha manifestado a este periódico que «para nosotros La Zarza es un lugar muy especial, pues siempre nos acogió con cariño y confianza. En sus restaurantes se han fraguado muchos de nuestros vinos y algunos de nuestros amigos más queridos son zarceños. Desde sus orígenes, Pago los Balancines tiene unos vínculos muy intensos con este pueblo».

El propietario de la bodega, que se mostró muy contento con el resultado del acto, añadió con emoción que «las sensaciones fueron fantásticas, ya que nunca habíamos realizado una cata conjunta de todas nuestras Parcelas Históricas. Se trata de nuestros vinos más especiales, únicos. Teníamos claro que cuando lo hiciéramos sería en un lugar amigo. No se me ocurrió mejor sitio que Aderezo para ello. Las pizzas que nos brindaron fueron excepcionalmente complejas, comida de altísimo nivel disfrazada de una simplicidad maravillosa. Los asistentes fueron un lujo, respetuosos, interesados, que me trasladaban el sentimiento de estar viviendo algo especial».¬¬

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