El Ayuntamiento instalará alertas de incendios y de dióxido de carbono a las personas mayores que vivan solas

Un escape de gas, una humareda o un olor excesivo a monóxido de carbono serán detectados por los dispositivos de detección de humos y de monóxido de carbono que el Ayuntamiento, a través de la Concejalía de Bienestar Social y Tercera Edadl, planea instalar en las viviendas de los vecinos de la localidad que superen los 80 años de edad y vivan solos.

La medida, impulsada desde el área social que dirige Cati Espinosa, pretende mejorar las condiciones de seguridad de estas persona, además de fomentar un envejecimiento activo y sin miedo ante situaciones de riesgo».

El dispositivo, cuya instalación será totalmente gratuita para los residentes, consiste en una alarma que se coloca en las viviendas y que, a la menor señal de riesgo de incendio o de altos niveles de monóxido de carbono, suena con estridencia, alertando al inquilino.

Según explica la concejala se trata de prevenir que las personas mayores con riesgo potencial de sufrir un incendio por algún incidente o descuido se percaten del suceso y reaccionen en la medida de sus posibilidades.

El objetivo del proyecto reside en reducir los tiempos de alerta para salvar vidas y favorecer que las personas mayores sigan viviendo en su entorno el máximo tiempo posible de forma segura.

El Consistorio ha destinado, este año, una partida de 3.000 euros para ofrecer este nuevo servicio, aunque se pretende incrementar esta cantidad durante los próximos años en caso de tener una cogida positiva para que se pueda beneficiar el mayor número de personas.

El próximo lunes, día 23, se abrirá la convocatoria de presentación de solicitudes para acogerse a esta medida y finalizará el próximo 30 de junio. Una vez terminado el plazo, se resolverán las solicitudes valorando criterios sociales, número de residentes en la vivienda, familiares cercanos colindantes, edad o patologías del residente.

El Consistorio calcula que este año se beneficiarán del proyecto una treintena de ancianos, de tal manera que poco a poco se vaya extendiendo esta medida a todos los mayores que vivan solos.