Momento de la salida a las 8.00 horas EL GRAN POPPY

Las Leguas Serranas ya son un referente entre las rutas por montaña de Extremadura

El atractivo recorrido y la impecable organización atraen a 500 participantes procedentes de diferentes comunidades autónomas

Lunes, 21 de octubre 2024, 20:52

La cuarta edición de las «X Leguas Serranas de La Zarza» convirtió a la localidad el pasado sábado en epicentro de las rutas por montaña de Extremadura. 500 inscritos -límite máximo establecido por la organización- procedentes de diferentes puntos de la geografía española tomaron la salida a las 8.00 horas en El Pilar. Por delante, cincuenta kilómetros con un desnivel positivo acumulado de 1700 metros. El Castillo de Alange, la sierra Peñas Blancas, Los Balancines, la sierra de Juan Bueno, las minas de Tierrablanca… fueron algunos de los atractivos parajes que los participantes tuvieron que recorrer.

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La prueba, organizada por el Club de Senderismo 'Peñas Blancas' y el Ayuntamiento, se consolida, después de cuatro años, como una de las más importantes del calendario regional.

Una climatología favorable y una temperatura ideal durante todo el recorrido, ayudaron a soportar el esfuerzo de los deportistas. Además, las lluvias caídas recientemente contribuyeron a que caminos y senderos se encontrasen en perfectas condiciones.

Espectáculo de luz y sonido en la salida, retransmisión en streaming, avituallamientos varios, comida a mitad y final de recorrido, speaker, fotógrafos, fisioterapia, ludoteca… fueron algunos de los servicios que ofreció la organización. A todo ello se unía la agrupación local de Protección Civil y el ejército de voluntarios que velaron en todo momento por la seguridad y y el cuidado de la prueba.

Pasado el mediodía finalizaba su recorrido Alberto Pita, el primero en llegar, que invirtió poco más de cuatro horas y media. El segundo sería el zarceño Iván Benítez. El numeroso público congregado en las inmediaciones de El Pilar reconocía con sus aplausos el gran trabajo realizado por los participantes.

A pesar de que la prueba carece de carácter competitivo, los participantes se exigen cada año mejorar los cronos, lo que hace que el grado de preparación sea más elevado en cada edición. De hecho, sólo se produjeron 15 abandonos, sin tener que lamentar ningún accidente de consideración. Todos los participantes superaron el reto de finalizar el trayecto en las 13 horas establecidas por la organización.

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Al final, satisfacción general entre participantes y organizadores en una cita que, a pesar de su corta andadura, ya es un referente entre las rutas de montaña de Extremadura.

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