

Pedro Espinosa
Domingo, 27 de diciembre 2015, 21:49
Antes de llegar a La Zarza, ¿en qué colegios estuvo?
- Empecé mi singladura en un colegio privado de Mérida en el curso 1976-77, a continuación aprobé las oposiciones y estuve destinado en Guareña, El Bohonal, Serradilla y, finalmente, recalé aquí, en La Zarza.
Después de tantos años, ¿qué recuerdos guarda de su primera época?
- Tengo unos recuerdos imborrables, no sólo de los primeros años, sino también de los actuales. ¿Cómo olvidar a esos compañeros y amigos con los que conviví durante tantos años, algunos de los cuales ya no están con nosotros? Con algunos de ellos aún me reúno todos los viernes después de clase y echamos un rato, siendo éste uno de los momentos más esperados de la semana. Mis compañeros, los de antes y los de ahora, son como mi familia, ya que con ellos paso una parte importante del día. Esta sintonía es, y ha sido, la razón fundamental del buen funcionamiento de nuestro colegio.
A lo largo de todo este tiempo, ¿qué cambios ha observado en general en la enseñanza?
- Ha habido un cambio muy profundo. Antes trabajábamos con menos medios materiales, escasamente el encerado, las tizas y la voz del maestro, también algunos murales y poco más. Ahora, nos han mandado tal cantidad de recursos tecnológicos que, en muchos casos, nos vemos en un aprieto en cómo utilizarlos. El trato con los niños y con sus familias también ha cambiado mucho y, en este caso, siento decirlo, creo que ha sido a peor. Pienso que los maestros hemos perdido autoridad y los problemas de disciplina han aumentado. Bueno, la escuela es un reflejo de la sociedad. Aún así, aquí los problemas son muy pequeños si lo comparamos con otros centros y localidades.
En estos más de treinta años, ¿no ha pensado nunca irse a Guareña?
- La verdad es que cuando llegué en 1.982 a La Zarza siempre pensé en estar unos cuantos años y después marcharme a mi pueblo. Sin embargo, pasado este tiempo me sentía tan bien aquí que fui posponiendo la fecha y, así, hasta llegar a la actualidad. Este pueblo es parte de mí y, aunque no vivo en él, me siento tan zarceño como el que más. Aquí finalizaré mis días como maestro.
De toda su trayectoria profesional, ¿con qué momentos o experiencias se quedaría?
Todos los momentos que he vivido han sido estupendos. Los que más me han marcado, a nivel escolar, han sido las concesiones de los numerosos proyectos y premios que nos han concedido a lo largo de estos años. No obstante, la experiencia del trabajo día a día y la relación con esta comunidad escolar han hecho que sea una persona afortunada por estar trabajando en lo que me gusta y en el sitio que quiero.
De la situación actual de la educación, ¿qué análisis haría?
- Los maestros, en general, no somos muy optimistas sobre la situación actual de la enseñanza. Creemos que falta motivación, interés y, sobre todo esfuerzo, por parte de una gran mayoría de alumnos. Puede ser que, con motivo de la crisis económica, las preocupaciones familiares hayan sido otras y se haya descuidado el aspecto escolar de los hijos. Espero que cuando se supere esta maldita crisis y todo vuelva a su cauce, la educación ocupe un puesto más relevante a nivel familiar y se valore, como se ha hecho siempre, la importancia que la educación tiene como forma de obtener un buen trabajo en la vida y, sobre todo, ser una mejor persona. También sería muy importante que los políticos nos dejasen de marear con tantas leyes y se pusiesen de acuerdo en una que durase mucho tiempo ya que, en la actualidad, cuando vamos conociendo los entresijos de una ley, nos la cambian y, así, resulta difícil trabajar.
¿Qué ambiente se respira entre el alumnado, compañeros y padres del centro que dirige?
- En general, hay un muy buen ambiente, siempre lo ha habido. Precisamente, ésta ha sido la razón más importante por la que he seguido en este colegio desde hace tantos años. Tengo contacto con muchos compañeros de otros centros y, sinceramente, creo que el ambiente humano que se respira en éste es un modelo. Los muchos maestros que han pasado por el colegio se han ido con pena y siempre con palabras de agradecimiento a padres, alumnos y compañeros. La administración educativa siempre nos ha considerado como un centro de referencia por el buen trabajo que se desarrolla en el mismo.
Los actuales edificios escolares tienen más de cincuenta años y están separados. ¿Para cuándo el nuevo colegio?
- Si se cumplen las previsiones que nos han prometido, creo que podrá estar listo a lo largo del curso 2017-2018. Siempre nos queda la duda, nos han engañado tantas veces Es mi ilusión. ¡Llevamos tantos años luchando por ello! Muchas veces, en plan de broma, he comentado que empecé mi profesión con la inauguración de un colegio nuevo y que la finalizaré igualmente. ¡Ojalá se cumpla!
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.