Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Martes, 4 de abril 2023, 17:13
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Opciones para compartir
Después de casi un siglo de actividad, la Panadería Lavado ha echado el cierre. Han pasado tres generaciones por ella. Los últimos han sido los primos Mateo y Fabián. Con este último charlamos en HOY La Zarza.
A sus 65 años recientemente cumplidos, casado y padre de dos hijas, Fabián nos hace un recorrido por el que ha sido uno de los negocios más emblemáticos de la localidad.
- Panadería Lavado ha sido un negocio totalmente familiar que ha pasado de generación en generación. ¿Nos podrían contar cómo y cuándo empezó todo?
La panadería la abrieron nuestros abuelos Fabián y Tomasa allá por los años 20. Después empezaron a trabajar nuestro padres y tíos (Martín, Toribio, Francisco y Antonio) y, a continuación los hijos (Fabián, Mateo, Fabián, Manolo, y yo). Somos, pues, la tercera generación.
- Y usted, ¿cuándo comenzó a trabajar como panadero?
Pues yo empecé a los 16 años y me he jubilado con 65, por lo que he estado trabajando 49 años.
- Dicen que la vida de los panaderos es muy sacrificada. ¿Es así?
Pues sí, es muy dura. Entre otras cosas por la falta de conciliación familiar, aparte del horario, sin descanso prácticamente.
- ¿Qué horario tenían?
Pues empezábamos a trabajar a las dos de la madrugada y terminábamos cerca de las dos del mediodía.
- ¿Cuáles han sido los cambios más significativos desde sus comienzos hasta ahora?
Podemos hablar de dos grandes cambios. Por un lado, la mecanización, que permite realizar los trabajos con más comodidad; por otro, la posibilidad de descansar los domingos, ya que al principio se trabajaba todo el año, excepto el día de Navidad y el de Año Nuevo.
- ¿Creen que tiene futuro el oficio de panadero?
Yo creo, sinceramente, que sí, pero con una condición: haciendo pan de calidad. Aunque probablemente el modelo tradicional deberá ser sustituido por otro más moderno.
- El pan de 'los Lavado' siempre ha tenido fama de ser un buen pan. ¿Cuál era el secreto?
Lo principal para elaborar un buen pan es trabajar con buena materia prima, disponer de horno de leña y hacerlo de forma artesanal. Ah, y sobre todo, mucha dedicación. Habría que añadir que nosotros llevábamos toda la vida haciendo pan con masa madre, aunque parezca que esto sea un invento de ahora.
- ¿Qué clases de pan hacían? ¿Y el más vendido?
Nosotros hacíamos varios tipos de pan: integral, flama, molletes, candeal… El más vendido era, sin duda, el pan candeal cocido en horno de leña.
- ¿Y es verdad eso de que el pan engorda?
Eso es una leyenda más de las muchas que existen. Yo creo que realmente lo que engorda es el acompañamiento.
- ¿Qué era lo que peor llevaban de su trabajo?
Sin duda, el horario y la falta de descanso.
- ¿Y la parte más satisfactoria?
Lo más bonito de nuestro trabajo era el agradecimiento y la satisfacción de la gente con nuestro producto.
- ¿Cuáles son los principales problemas a los que se enfrenta el sector en la actualidad?
El principal problema al que nos tenemos que enfrentar en la actualidad es el aumento de los costes energéticos en general y la subida del precio de nuestra materia prima, la harina, en particular.
- ¿A qué va a dedicar ahora el tiempo de su jubilación?
Pues voy a intentar hacer todas las cosas que antes no pude por falta de tiempo, pero por encima de todo, disfrutar de la familia. Además, me gusta pasear, seguir a mi querido Atleti, ir a pescar, viajar, leer, etc.
- A modo de despedida, aunque ya dejaron de trabajar en diciembre, ¿qué dirían a las personas que durante tantos años han sido sus clientes?
Pues me gustaría agradecer de todo corazón a nuestros clientes su fidelidad y el cariño recibido durante estos años. Resulta muy reconfortante sentir el aprecio de la gente por la Panadería Lavado.
Me gustaría destacar que ha habido familias que les cogían el pan a nuestros abuelos, posteriormente a nuestros padres y, finalmente, a nosotros.
Por último, no podría despedirme sin dar las gracias a mi mujer y a mis hijas por compartir pacientemente estos años y haber tenido que renunciar a muchas cosas que nos hubiera gustado hacer en familia.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.