
Con motivo de la llegada del verano, el Ayuntamiento publicó el mes pasado un bando mediante el cual recordaba a todos los propietarios de solares no edificados existentes en el casco urbano la obligatoriedad de garantizar las condiciones de seguridad en materia de incendios y salubridad.
La Ordenanza de Convivencia Ciudadana que recoge estas obligaciones, dispone en su artículo 16 que «todos los solares no edificados existentes en el casco urbano deberán hallarse debidamente vallados con obra de mampostería o materiales semejantes hasta una altura mínima de dos metros, contados desde el nivel del suelo. La Alcaldía podrá permitir, si lo estimare oportuno, que dicha valla se sustituya por tela metálica que no sea de espino, siendo para ello indispensable que el solar de que se trate esté alejado del casco urbano y/o de sus vías principales».
Independientemente de las obligaciones urbanísticas que los dueños de los solares tienen, continúa la ordenanza, deberán ocuparse de que los terrenos se encuentren en perfectas condiciones de limpieza y salubridad.
El plazo concedido por el Consistorio para la adecuación de los citados solares finaliza este viernes, 3 de julio, fecha tras la cual los servicios municipales se encargarán de comprobar el cumplimiento de esta norma, considerándose infracción el incumplimiento de las obligaciones contenidas en la citada Ordenanza.
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