El Zarceño se reencuentra con la victoria

Ya tocaba. A la quinta fue la vencida. Por fin la afición se llevó a casa una alegría tras la victoria conseguida por el CD Zarceño ante un serio rival como el CD San Serván.

Y eso que los fantasmas volvieron a aparecer a los seis minutos con el gol del arroyano Miguel Rubia que cruzó inapelablemente un balón recibido entre líneas de su hermano José. Varias llegadas en los primeros minutos hacían presagiar lo peor para los locales. A los 12 minutos el colegiado no consideró penalti una jugada en la que el cancerbero visitante arrolló literalmente al delantero Casi dentro del área, jugada que fue muy protestada por la afición.

Los tierrablanqueros intentaron rehacerse del golpe inicial a base de coraje. La ocasión más clara para los de casa llegaría pasada la media hora de juego. El portero Coria falló estrepitosamente al intentar despejar con el pie, dejando el balón en ventaja a un sorprendido Juanjo que tardó unos segundos en reaccionar y dio tiempo al guardameta a rehacerse y desviar a córner su disparo. Empujaba el Zarceño, que iba de menos a más.

En el minuto 42 llegaría el tanto del empate. Iván Andújar se llevó un balón en disputa con un defensa arroyano y asistió a Nogales para que este batiera al guardameta rival.

Igualada justa ante el empuje local. Con este resultado finalizaría un primer tiempo en el que empezó frío el Zarceño pero que poco a poco fue entrando en el partido. Atrás quedaban varias llegadas peligrosas del San Serván desbaratadas por las buenas intervenciones de Gordillo.

La segunda mitad arrancó con varias acciones importantes para el devenir del choque. En el minuto 49 se retiraba lesionado el central Chema, bastión importante en la línea defensiva zarceña, y en el 50, llegaría el gol de la remontada con otra gran jugada de Iván Andújar –gran partido el suyo- al irse por banda, regatear a un rival y cruzar al palo largo del guardameta Coria. Poco después, una nueva galopada del de Villagonzalo por banda izquierda fue cortada con una dura entrada por Arévalo. Roja directa y los de Arroyo se quedaron con diez.

Los minutos posteriores transcurrieron con imprecisiones y juego embarullado. El ambiente se calentaba por momentos, tanto dentro como fuera del terreno de juego. Los de casa buscaban el tercero para sentenciar el encuentro y los arroyanos, la igualada.

Hasta que llegó el minuto 81 en el que Mario, que había sustituido con anterioridad a Iván, remachó con pierna izquierda un balón suelto tras jugada personal de Nono. 3-1 y delirio en la grada. Aún quedaría tiempo para que los arroyanos sufrieran una nueva expulsión (Porrino, por doble amarilla) en los minutos de descuento.

Con este resultado se llegaría al final. Merecida y trabajada victoria dedicada a una afición que agradeció con una calurosa ovación la entrega de sus jugadores. Después de cuatro derrotas consecutivas, el Zarceño rompió la dinámica negativa dejando una buena imagen y obteniendo tres importantes puntos ante un difícil rival.

El próximo domingo, el Calamonte UD. El camino sigue siendo largo y complicado, pero con la actitud mostrada ayer por el equipo se pueden ganar algunas batallas.