Tablas en el arranque liguero

A pesar de la crisis sanitaria y de todas las medidas de seguridad e higiene establecidas, el encuentro entre el Zarceño y el Torremejía había levantado cierta expectación por un doble motivo: por un lado, por tratarse del primer encuentro oficial después de más de medio año; por otro, por ser un partido de rivalidad comarcal entre dos viejos conocidos.

Pero el choque, a pesar de los cuatro goles, no resultó nada vistoso para los cerca de 200 espectadores que se dieron cita en la ciudad deportiva de La Zarza. El resultado final de empate a dos hizo justicia en un encuentro que ninguno de los dos equipos mereció ganar.

Salieron enchufados los de casa que, empujados por el viento, pronto pusieron cerco a la portería defendida por Murillo, ex guardameta del Zarceño. A los cinco minutos sería Andújar el encargado de inaugurar el marcador para los locales. Gran asistencia de Izan entre líneas por el centro de la defensa, control del delantero de Villagonzalo y disparo raso para batir al cancerbero visitante. Buenos primeros 15 minutos con aproximaciones de peligro al área torremejiense. En el 17, gol anulado al atacante local, Izan, por presunto fuera de juego.

Poco a poco los visitantes fueron deshaciéndose del empuje local y empezaron a mostrar más resistencia. Pasada la media hora, en una jugada en el área zarceña el árbitro decreta penalti al ser derribado Paquino por el lateral derecho zarceño, López. Abel Pinilla transforma con la izquierda sin que Pedro pudiera hacer nada por detener el esférico.

Con el resultado de empate a uno marcharon los dos equipos a la caseta.

La segunda mitad arranca con un temprano gol de los de Torremejía merced a un cabezazo de Parejo a la salida de un córner. El resultado a favor y la ayuda del viento hacían presagiar malas noticias para los blanquiazules. Pero no fue así. Movió el banquillo Cabezas dando entrada a Cerrato II y a Juan Pedro, para dar algo de frescura al equipo. Y a fe que lo consiguió, porque uno en la delantera y el otro en la defensa reforzaron ambas líneas ante a presión del conjunto rival. Y cuando más apretaban estos, llegó el tanto del empate.

Corría el minuto 76 cuando en una falta sacada sobre la portería de Murillo, se produce una indecisión defensiva que aprovecha un listísimo Cerrato II para peinar el balón hacia atrás para que Izan rematara a placer y estableciera el 2-2 que, a la postre, sería definitivo.

Entre faltas y otras interrupciones (cada equipo vio cinco tarjetas amarillas) transcurrió el tiempo restante sin que volviera a moverse el marcador.

Finalizaría la contienda con un empate que puede considerarse justo en un partido con más intensidad y corazón que juego, en un inicio liguero en el que ambos equipos demostraron que aún les queda trabajo por hacer.

Al final del partido se procedió al lanzamiento de penaltis para decidir a qué vitrinas se iba el II Trofeo Juan Francisco Lavado', en recuerdo del antiguo jugado y directivo tierrablanquero. Finalmente se quedó en casa. El próximo domingo, desplazamiento a Arroyo de San Serván.